¿Cómo regula la Ley GENIUS a las stablecoins con rendimiento?

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La Ley GENIUS, promulgada en EEUU en julio de 2025, distingue claramente entre las stablecoins como medio de pago y los productos de rendimiento como inversiones. En la práctica, esta distinción es el desarrollo regulatorio más importante para los proyectos que desarrollan stablecoins con rendimiento, ya que el principio fundamental de la ley es hacer que las stablecoins de pago se comporten como dinero digital: totalmente reservadas, auditables y fáciles de redimir, y no como un producto que genera intereses solo por poseerlo. Lee este artículo para entender cómo las stablecoins con rendimiento se ajustan a la nueva realidad tras la Ley GENIUS.

¿Qué son las Stablecoins con Rendimiento?

Antes del análisis legal, revisemos el panorama actual de las stablecoins con rendimiento. Estos son una clase de productos diseñados para hacer dos cosas a la vez: mantener una unidad de cuenta de $1 mientras distribuyen rendimiento a los holders. En la práctica, muchos de los proyectos más populares siguen una arquitectura de doble activo. El primer activo es una stablecoin anclada al USD (o dólar sintético) destinada a mantenerse cerca de $1. El segundo es un token con rendimiento que representa una reclamación sobre la stablecoin subyacente más los rendimientos acumulados.

Normalmente, los usuarios acuñan una stablecoin anclada al USD, luego la staking o la bloquean en un contrato de ahorros o vault. A cambio, reciben el token con rendimiento, que acumula rendimiento con el tiempo. En lugar de pagar intereses, esto se refleja en el precio del token con rendimiento que está creciendo constantemente a cierto ritmo.

El rendimiento proviene de estrategias empleadas por un protocolo (emisor). Algunos diseños se basan en arbitraje cripto-nativo (por ejemplo, spreads de financiamiento o bases en mercados perpe…